El Mini es sin duda un coche diferente al resto. Fabricado por los ingleses (British Motor Company) a comienzos de los años sesenta, se convirtió en un símbolo de Gran Bretaña y del resto del mundo. Su éxito fue tal que BMW se hizo cargo de su producción a partir del año 2001, dándolo a la marca el nombre de MINI, pero manteniendo la misma esencia. Hay que destacar que Mini quedó segundo en una encuesta acerca de cuál había sido el automóvil del siglo con mayor influencia en el mundo, solamente superado por el Ford T. [polaroidimage title=»Mk I Austin Mini Super-Deluxe de 1963″ group=»»]https://www.segurclassic.com/club/wp-content/uploads/2018/04/1963_MkI_Mini.jpg[/polaroidimage] El diseño y desarrollo del Mini estuvieron marcados por la escasez de combustible. El Reino Unido sufrió un racionamiento de la gasolina fruto de la Crisis de Suez, que redujo el suministro de petróleo. Las ventas de grandes vehículos cayeron, y como consecuencia aumentaron las ventas de automóviles utilitarios, la mayoría de los cuáles eras de origen alemán. Es aquí donde Leonard Lord, mandatario de BMC, ordenó la fabricación de un coche que cumpliera una serie de requisitos. El Mini debía tener unas dimensiones determinadas, con la finalidad de que cupiesen 4 personas en su interior de forma cómoda. Además, incluía un motor Serie A de cuatro cilindros refrigerado por agua, una caja de cambios de cuatro velocidades, y tracción delantera, convirtiéndose en un referente para los modelos posteriores con esa tracción. [polaroidimage title=»Mini modelo de 1975″ group=»»]https://www.segurclassic.com/club/wp-content/uploads/2018/04/640px-Morrismini.jpg[/polaroidimage] En España el Mini lo fabricó Authi en una factoría de Pamplona desde el año 1968. Cinco años más tarde apareció la versión más deportiva que se había construido en nuestro país, el Mini Cooper 1300. Este modelo tenía un precio bastante elevado para lo que era la época, 156.000 pesetas, por lo que se convertía una adquisición muy valiosa. La marca británica también estuvo asociada a los éxitos en competición a nivel internacional, ya que en 1964 consiguió la victoria en el Rallye de Montecarlo. El Mini Cooper 1300 se diferenciaba de los demás modelos de la marca por un techo de vinilo, una parrilla delantera y unas llantas más anchas. El aspecto diferencial se escondía bajo el capó, donde había un motor de 1.300 alimentado por dos carburadores con unos 68 CV de potencia. En cuanto a sus prestaciones en carretera, no era especialmente eficiente en autopista, pero era un coche perfecto para ciudad y tramos con curvas. [polaroidimage title=»Authi Mini Cooper 1300″ group=»»]https://www.segurclassic.com/club/wp-content/uploads/2018/04/authi-01.jpg[/polaroidimage] Como la mayoría de vehículos, sus diseños y funcionamiento del motor tienen una vida marcada, y la del Mini empezó en 1959 y se paralizó en el año 2000. Pero no fue un punto y final, fue un punto y seguido. MINI ha prolongado la vida de este símbolo del mundo del motor adaptándolo a los tiempos que hoy en día corren. MINI ha cambiado la carrocería, la estética, el motor y la seguridad, permitiendo que sea un coche más seguro, más eficiente en autopista, y con un motor más potente. Pero en el siglo XX el Mini es el Mini. [polaroidimage title=»Mini actual de 2018″ group=»»]https://www.segurclassic.com/club/wp-content/uploads/2018/04/mini_2018_07.jpg[/polaroidimage]